Cuando la escuchas cantar es todo un agasajo, es de las artistas que disfrutan al máximo la entrega sobre el escenario y que con un estilo único hace que las penas se olviden y el corazón baile de la emoción, olvidando por momentos aquellos tragos amargos por el que todos hemos pasado.
Es Margarita María de Santa Teresita Vargas Gaviria y se ha ganado con su carrera el reconocimiento como “La Diosa de la Cumbia”, una mujer que derrocha energía en el escenario, que encanta con esa sonrisa tan singular e ilumina cualquier lugar con su presencia, con su voz privilegiada, esa voz que la hecho quedarse en el corazón de miles de seguidores que acuden a verla en donde se presente.
Originaria de Medellín, Colombia, Margarita tiene en las venas la música, su padre, gerente ejecutivo de Radio Cadena Nacional (RCN), una de los grupos radiofónicos más importantes en su país, dejó una huella en ella que ni el tiempo, ni la lejanía, ni los problemas le han quitado: Cantar.
Sus inicios no fueron fácil, las historias son muchas, en su camino como integrante de La Sonora Dinamita se entrelazaron historias de amor, desamor, engaños y traición pero también sirvieron para forjar en ella la mujer valiente que, pese a la adversidad triunfaría como solista en los años noventa, cuando decidió hacer su propia carrera e iniciar así su propia historia donde ha dado vida a más de 27 álbumes musicales entre inéditos, de concepto y recopilación.
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